Diversidad sensorial y riesgos psicosociales: una mirada desde la prevención laboral
Exploro cómo la alta sensibilidad impacta en el bienestar laboral y la importancia de adaptar los entornos de trabajo a las nuevas realidades psicosociales.
El otro día alguien me comentó que lo que escribo podría ser “la puerta” para abrir espacio a más personas neurodivergentes en entornos laborales donde todo parece estar diseñado para los más rápidos, los más fuertes, los que nunca dudan ni paran.
Esa frase me hizo reflexionar.
Porque es cierto: vivimos en un mercado laboral que funciona en piloto automático. Uno que aplaude la velocidad, la competitividad y la eficiencia... pero olvida lo esencial: ¿Quiénes somos realmente? ¿A qué ritmo podemos y queremos vivir?
He leído muchos libros tipo “Cómo sobrevivir a la ansiedad” o “10 claves para mejorar tu salud mental en el trabajo”. Al principio me ayudaban, claro. Pero todos tenían algo en común: hablaban desde la experiencia individual, sin entrar en el contexto que muchas veces origina el malestar.
Y eso es un problema. Porque no todo se arregla con fuerza de voluntad. A veces, lo que hace falta no es adaptarse más, sino cambiar el marco, la perspectiva, que nos exige encajar donde no encajamos.
Lo estructural también se siente en el cuerpo
En España, según el Informe Anual del INSST 2023, más del 40% de los centros de trabajo presentan riesgos psicosociales relevantes. La fatiga mental y el estrés sostenido son ya una de las principales causas de bajas laborales.
Sin embargo, solo el 20% de las empresas cuenta con medidas efectivas orientadas a prevenir el daño psicológico.
Desde la prevención tradicional se habla de cargas mentales, turnicidad o falta de autonomía. Pero muchas veces esas evaluaciones se quedan en el papel: se puntúan, se archivan y poco más.
La prevención no puede ser solo reactiva. Debe incluir una mirada humana, realista y diversa.
Ser PAS no es un problema. Invisibilizarlo sí.
Las Personas Altamente Sensibles (PAS) no son un diagnóstico ni una etiqueta de moda. La alta sensibilidad es un rasgo de la personalidad científicamente descrito por la doctora Elaine Aron, presente en alrededor del 15 al 20% de la población.
Al procesar más la información sensorial y emocional con mayor profundidad. Se ven fácilmente afectadas por entornos sobre-estimulante o poco empáticos. Y a mí me ha pasado.
En el entorno laboral, esto puede ser tanto una fortaleza como una fuente de sufrimiento, según el clima, el liderazgo y la cultura organizativa.
¿Cómo se podría detectar a una persona PAS en el equipo?
Desde RRHH o PRL, no se trata de etiquetar, sino de observar con atención. Algunas señales que pueden ayudarte a identificar perfiles altamente sensibles:
Son muy conscientes del ambiente: luces, ruido, temperatura o desorden les afectan más.
Perciben rápidamente los cambios de humor o tensión en el equipo.
Pueden sobresaturarse con tareas simultáneas o presión constante.
Muestran alta empatía y preocupación por el bienestar de los demás.
Reflexionan mucho antes de tomar decisiones.
A veces necesitan retirarse para regularse, especialmente en reuniones intensas.
Integrar esta mirada permite diseñar estrategias preventivas más ajustadas y, sobre todo, mejorar el clima laboral. Un entorno que cuida a sus PAS suele ser también un entorno más sano para todos.
Herramientas útiles que se podrían aplicar:
✅ Observación participativa: no solo informes, sino conversaciones reales con los equipos, en entornos de confianza, para identificar puntos de tensión emocional.
✅ Cuestionarios psicosociales adaptados: como el FPSICO del INSST, pero con seguimiento cualitativo. Lo cuantitativo no lo es todo.
✅ Espacios de pausa emocional: reuniones breves no operativas, para revisar cómo están las personas, no solo las tareas.
✅ Formación a mandos intermedios: enseñar a detectar señales tempranas de saturación o bloqueo emocional. No todo es “falta de actitud”.
✅ Diseño flexible de tareas: en lo posible, permitir concentración en tareas únicas, reducir estímulos innecesarios y ajustar ritmos cuando haya sobrecarga.
Termino con esto:
Quizá este texto no tenga todas las respuestas.
Pero tal vez sea una grieta. Una forma de decir: no eres débil, estás viendo lo que otros no ven.
Y eso también es parte del cambio.
💬 ¿Te has sentido alguna vez fuera de lugar por sentir diferente en tu trabajo? ¿Has tenido que fingir fortaleza para poder encajar? Puedes compartir tu experiencia abajo o reenviar esta nota a alguien que lo necesite leer.
A veces, lo estructural empieza a cambiar cuando alguien se atreve a contarlo.
Mientras tanto, cuídate mucho




